Quien le iba a decir a Edward Albert Christian George Andrew Patrick David, después conocido
como duque de Windsor, quien a sólo unos meses de iniciar su reinado, causó una
crisis constitucional cuando le propuso matrimonio a la celebridad
estadounidense y dos veces divorciada Wallis Simpson que hoy el hijo de la hija
de su hermano, el principe Harry, se casaría con una actriz, cuando en su
tiempo, los miembros de la dinastía Windsor, los primeros ministros del Reino
Unido y sus dominios se opusieron a su matrimonio, argumentando que el pueblo
nunca la aceptaría como reina. Eduardo sabía que el gobierno encabezado por el
primer ministro británico Stanley Baldwin renunciaría si los planes de
matrimonio seguían adelante, lo que obligaría a convocar nuevas elecciones
generales y podría arruinar irremediablemente su condición de monarca
constitucional, políticamente neutral. En lugar de renunciar a su amor por la
señora Simpson, Eduardo decidió abdicar. Fue sucedido por su hermano menor,
Alberto, que eligió usar el nombre de Jorge VI. Con un reinado de sólo 325
días, Eduardo fue uno de los monarcas de más corta duración en el trono en la
historia del Reino Unido y nunca llegó a ser coronado.
Por eso hoy
después de presenciar la boda le llamé por teléfono y esto fue lo que hablamos…
—Coño
Carlito, que bueno que me hablaste, a ver si me ayudas a que se me baje este
empingue que tengo… ¿Has visto cómo cambian los tiempos?
—No te
enojes Lalo, es la evolución de la vida. Si ‘La Gaviota’ es la primera dama de
México, ¿qué te asombra?
—Es verdad
Charlie…pero pienso en mi pobre Wallis, no la bajaron de cabaretera y mira… a
esta ni en su casa la conocen… pero bueno, me queda el consuelo que con dos o
tres jaladas de pies que le demos en las noches, la nueva princesa se asuste,
le pida el divorcio y se regrese para Yunaistes, se ponga a cantar reggaetón y
nos deje en paz… porque si esto sigue como va, dentro de poco la familia de
Camila va a querer un hueso en el reinado y eso, eso sí que no lo permitiré mi
Charlie…
Y diciendo
esto me colgó el teléfono… Unos minutos después me envió un whatsApps donde me
decía —: Disculpa Charlie, pero me entró una llamada de Winston…, también anda
empingao.
Nuestro actual rey tuvo en su juventud una novia. No le dio sus bendiciones la Casa Real, porque los padres de la misma estaban divorciados. Pasado el tiempo conoció a otra chica, pero en este caso la divorciada era ella. Es nuestra actual reina.
ResponderBorrarBueno, los tiempos cambian porque la monarquía, como institución yo creo que se ha quedado obsoleta, pero ya que existe, qué mejor que el tema de sangre azul quede relegado, ¿no?
ResponderBorrarBuena crónica, imaginativa y muy actual. Un abrazo
Es interesante lo que comentas, pero tendría que
ResponderBorrarvivir en tu país para dar mi opinión acertada.
Saludos desde Argentina