1
Hace mucho tiempo que tiene una historia que
deambula por su mente. Según él, da para mucho más que un cuento. Pero siempre
que se sienta a escribirla, se desvanece, se vuelve invisible a sus neuronas y
no encuentra la primera frase, los adjetivos adecuados, el tiempo en que quiere
contarla. Y lo peor es que por más que se esfuerza siempre escribe lo mismo
como si una fuerza mayor le obligara a hacerlo. Y sabe que la historia está
ahí. Se trata del encuentro con una mujer…, pero mientras está sentado frente
al teclado no puede acordarse como va ni tan siquiera cómo es ella. Y lo más increíble
es que en dos ocasiones, en que tratando de burlar lo no singular que le
resulta, el sentirse poseído de un olvido temporal, ha grabado la historia en
una vieja cinta de cassette, y cuando se dispone a copiar el dictado que su
propia voz le hace, escribe siempre lo mismo. Para que se lleven una idea más
clara, si la grabadora le dice: Nací en
un barrio bajo al sur de una gran ciudad, y para desgracia, la pobreza en la que vivíamos impidió a mis padres
atender a tiempo mi congénita debilidad visual, él escribe: Es ella quien te mira y soy yo quien ha
venido a buscarte.
Y así llevaba algún tiempo. Sin encontrar
palabras para explicar este fenómeno que solo pasa con esa historia que parece
estar preconcebida para no ser leída ni escuchada por nadie. Una historia que
solo está en su mente y que cuando está frente al teclado presto a escribirla,
se le olvida porque la protagonista siempre le dice: Es ella quien te mira y soy yo quien ha venido a buscarte.
2
Una noche, en la que se acostó temprano, el
grato recuerdo de aquella mirada lo llevó a dar un paseo por su pasado. Hacía cuatro
años, su esposa había fallecido en un trágico accidente y ahora, por primera
vez en tanto tiempo, podía verla de una manera tan nítida, que no podía afirmar
si estaba soñando o era realidad.
Sin pronunciar palabras, ella se acostó a su
lado y después de algunos minutos de una contemplación casi divina, le dijo:
― Estoy aquí y quiero me mires fijamente a los
ojos. Obsérvalos bien, ve detenidamente cada uno de sus detalles, fíjalos en tu
mente y hazme el amor por última vez. Quiero además que prometas que vas a
rehacer tu vida. Ha pasado mucho tiempo y no es justo que sigas deteniéndote, por tu bien y por el de nuestro hijo. Te aseguro que siempre estaré mirándote y nada me dará más gusto que
verte feliz. ¿Crees que puedas hacerlo? ‒ Le
preguntó mientras deslizaba sus pies sobre la cama elevando sus rodillas al
tiempo que abría lentamente sus piernas.
― Trataré ― respondió sonriente aunque por
dentro toda su osamenta temblaba. Se inclinó y apoyando sus rodillas en la
cama, fue a gatas hasta acercar el rostro a su entrepierna. Su cuerpo temblaba,
pero su olor a hembra provocó el clic perfecto para que cerebro y sexo se
interconectaran. Se miró hacia dentro implorándole a los dioses permitirle
realizar un exitoso desempeño. El reto era ambicioso. Volver a estar con ella
después de tantos años, y pensando además que estaba muerta, implicaba cruzar
el umbral de su experiencia. Mojó sus labios de sus jugos, que poco a poco
calmaron su incontenible sed por ella. El desafío empezó. Y extrañamente, la
mágica ilusión de un deseo inaguantable, estaba haciéndose real…
Abrió sus ojos cuando sintió sus uñas aferradas
a su espalda… pero ella no estaba a su lado. Ya amanecía. Y otro suceso
inexplicable lo hizo presa de un inmenso desasosiego. A su lado un bulto de
hojas impresas por delante y por detrás, esperaban su lectura. El pánico fue
creciendo cuando en las primeras líneas de aquel texto misterioso pudo leer: Nací en un barrio bajo al sur de una gran
ciudad, y para desgracia, la pobreza en la que vivíamos impidió a mis padres
atender a tiempo mi congénita debilidad visual…
Era su historia, esa que parecía imposible
escribir.
3
Dos meses después, al final de la presentación
de su novela y durante la firma de autógrafos, una chica se acercó con su
libro.
‒ Podría
dedicarme su novela.
Él levantó
la vista y quedó paralizado cuando sus miradas se cruzaron.
‒ Esos
ojos… ‒ dijo casi temblando.
‒ ¿Te parecen
conocidos?
No hubo
respuestas. Solo un flechazo a primera vista que le anunciaba que su prologada soledad
estaba viviendo los últimos segundos a su lado. Él se puso de pie y fue hacía
ella. Se abrazaron mientras escuchaba el susurro de su voz que le decía al oído…
‒ Gracias
a tu esposa, pude recuperar mi visión. Es
ella quien te mira y soy yo quien ha venido a buscarte.
Gracias a todos por los comentarios en el post anterior.
ResponderBorrarHoy les dejo un relato... que pareciera una ficción pero quien dice que no podría ser real.
abrazos
carlos
Qué bueno, Carlos. Me ha encantado.
ResponderBorrarUn abrazo.
gracias Chema. Tú siempre tan gentil. Te envio un gran abrazo.
Borrarcarlos
Un saludo desde Andalucía (España)
ResponderBorrarIgual Trini... me dejaste la boca hecha agua con tu ultimo plato ...
Borrarsaludos
carlos
Que hermosa historia. Tiene misterio, amor, las claves de un buen cuento.
ResponderBorrarMe gustó.
mariarosa
Qué bueno que te gustó Mariarosa...
BorrarMuchas gracias
Carlos
Bueno... otra exhibición.
ResponderBorrarTe vuelvo a requetefelicitar.
Saludos.
Gracias Amigo Toro.
BorrarComo dice el Chema, uno aprende de los genios, y tú eres uno de ellos.
Abrazos
carlos
Ayyy, me ha puesto la carne de gallina, muy bonito el relato. Que sutil la escena de sexo con su mujer ya fallecida y que redonda la historia. Me ha encantado y me ha emocionado, Carlos.
ResponderBorrarUn abrazo!!
Gracias U-topia... qué bueno que te gustó y que te haya emocionado. Un placer tenerte por acá.
BorrarAbrazos
Carlos
Ojalá todos los misterios que nos persiguen y acechan tuviesen un desenlace tan feliz como el que nos has narrado... Muy sorprendente, por cierto.
ResponderBorrarSaludos
Gracias Luis Antonio.
BorrarDespués de la perdida de su esposa, de no salirle la historia y de su extensa soledad, la vida tenía que recompensarlo...
Saludos
Carlos
Aunque se le esfumó; buen polvo le pegó.
ResponderBorrarMuy bien Carlos: Un abrazo.
Gracias Rafa, y mira que bueno le hizo, se folla a su mujer muerta, se levanta medio sonámbulo, y escribe la historia que no podía ser escrita y además conoce la historia de la chava que no veía y a la que le pusieron las corneas de su esposa...
BorrarAbrazos y a follar que da mucha inteligencia jajaja
carlos
Un cuento que me atrapó desde el inicio, con ese solpo de misterio y buen arte inspirado. Cuántas veces me ha suceddido eso de endar a la caza de una historia que está ahí y es tan jíbara, tan huidiza. Gracias, amigo. Un abrzo.
ResponderBorrarGracias Maestro... cuantas veces nos ha pasado a todos esto... tener una historia, y que no salga... te confieso que con esta me pasó... tenía en mente otra cosa y no me salía, hasta que se destaparon las Neuronas.
BorrarAbrazos Paisano y Maestro Pastor.
Carlos
It's a pity you don't have a donate button! I'd most certainly donate to this fantastic blog!
ResponderBorrarI guess for now i'll settle for bookmarking and adding your RSS
feed to my Google account. I look forward to fresh updates and will talk about this blog with
my Facebook group. Chat soon!
my website ... Jurassic Park Builder hacks
La verdad no me gusta mucho eso de las votaciones... hay una suscripción vía Email.
BorrarSaludos y Gracias Anónimo.
Felicidades, Carlos.
ResponderBorrarMuchas Gracias Dr. Krapp.
Borrarsaludos
carlos
Ohhhh me has dejado encandilada que bonitaaaa.
ResponderBorrarBesitos
que bueno Inma... muchas gracias
Borrarcarlos
Un final sorpresivo, inesperado.
ResponderBorrarUn abrazo
Gracias Malque.
Borrarqué bien que te gustó.
abrazos
carlos
Carlos un saludo desde Granada (España)
ResponderBorrarGracias
BorrarUn saludos e igual para allá
carlos
Preciosa historia. Gracis por la grata lectura.
ResponderBorrarFuerte abrazo.
Jeniffer Moore
Gracias Jeniffer. Saludos a Pastor.
Borrarcarlos
Buen fin de semana amigo.
ResponderBorrarBesitos
igual Inma
Borrarabrazos
carlos
Una historia en la que se cruzan muchas cosas, la falta de inspiración, el miedo a la página en blando, el amor y el recuerdo, el poder de la mirada y la superación del pasado.
ResponderBorrarMuy buen relato.
Gracias Pepe.
Borrarsaludos desde por acá.
carlos
La historia parecía atascada, pero finalmente se destapó en un desenlace imprevisto, de aquellos que te hacen decír ¡ooooohhhh, no me lo esperaba!
ResponderBorrarMuy bueno, Carlos, disculpas por la demora en leer.
Abrazo.
Gracias Mirella.
BorrarNo te preocupes, si pasas tarde o temprano, no hay problemas...
abrazos
carlos
ResponderBorrarUna historia pergeñada que al final nos llega a los lectores, un cuento escrito por dos autores, el protagonista y el escritor que es quien nos sorprende con un final impredecible. Un abrazo y voy a apuntarme en el cuadrito de las fotos.
Gracias Ester. Bienvenida.
Borrarsaludos
carlos
Te quedó hermoso este relato! Y, sí te quedó muy sorpendente el final.
ResponderBorrarMuchos besitos de anís.
Gracias S.O
BorrarAbrazos
Carlos
Súper mi cuasi... muy sorprendente el final. Traes la pluma muy afilada.
ResponderBorrarBesitos de anís.
Pos, se hace lo que se puede jajajaja
BorrarAbrazos
carlos