viernes, 9 de marzo de 2018

EL DETECTOR DE METALES



Vivir en el campo cubano tenía sus pros y sus contras. Al guajiro solo se le asociaba con caballos, puercos y largos surcos de cualquier cosa que naciera en el campo, pero nunca con que pudiera estudiar física; digamos que este es uno de los contras más cabrones de vivir en el campo.
Y así le pasó a Bartolo. Un estudiante de Física que salió huyendo de su batey por allá por el año 70 cuando la efervescencia revolucionaria andaba bien subida con aquello que los 10 millones iban porque iban, aunque la verdad haya sido otra.
Bartolo, tenía un abuelo que todos los días cuando caía la tarde, le contaba que por los alrededores del Batey había un tesoro enterrado. Según decía, por allá del 26, después que había pasado el ciclón y había destrozado más del 90% de la ciudad más cercana al batey, como diez días después, había llegado un forastero que había entrado a la bóveda del banco y se había llevado todo el dinero, el cual había enterrado por los alrededores del caserío.
Según cuentan los más antiguos del lugar, todo aquello era producto de la imaginación del carismático abuelo de Bartolo, pero por años estuvieron buscando por todos los rincones y no quedó un lugar a la redonda donde hubieran hecho un hoyo para buscar el dinero.
Y heredando la terquedad de su abuelo ya fallecido, Bartolo, como buen estudiante de física, movido por la inquietud de la experimentación, se dispuso a construir un detector de metales.
—Es fácil papá —le dijo mientras le mostraba el artefacto que había construido—. Mira, los detectores de metales funcionan mediante una propiedad física que se llama magnetismo. El detector crea un campo magnético a través de una bobina de cable, y entonces dirige este campo magnético a través de la superficie del suelo. Otro circuito dentro del detector de metales es el que “escucha” este campo magnético y emite un tono que puedes escuchar por un altavoz. Cuando la bobina de cable pasa por encima del terreno, y hay un objeto metálico, el sonido cambiará de tono. Este cambio de tono indica que estás cerca de un objeto metálico y que deberás empezar a cavar. Cuanto más grande sea la bobina de cable, más sensible será el detector de metales.
—Pero hijo, ¿Cómo fue que construiste eso? —preguntó el papá algo asustado.
A Bartolo no le dio tiempo explicarle a su papá como había construido el detector desarmando un radio viejo y una televisión inservible que había en el laboratorio de física donde estudiaba porque una sirena se escuchó de repente anunciando la llegada de un carro patrullero que venía a detenerlo.
Dos policías entraron a la fuerza al bohío y lo esposaron más rápido que lo canta un gallo con el único y equivocado argumento que Bartolo era un agente al servicio de la CIA que había introducido al poblado un arma de exterminio masivo.

13 comentarios:

  1. La represión es siempre cruel. La libertad ya sabemos que una entelequia, pero al menos que nos dejen experimentar, ¿no?

    Un abrazo

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    1. ASÍ ES... pero lo peor es las cosas que se ven cuando las entendederas se cierran y los ojos se ciegan al servicio de una dictadura. Cualquier cosa se puede creer.
      saludos
      Carlos

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  2. Lo que mas me gusta de mi cuento es que no me lo invente(fe de erratas: no puedo acentuar las palabras a mi computadora le cuesta el espanol. Tampoco puedo poner la ene, que no es ene es que no puedo pronunciar la n con tilde.

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    1. Por eso decía en el comentario anterior... cualquier cosa puede ser verdad aunque parezca ficción... y así fue, este cuento salió de un post en FB, y una anécdota que tú hiciste y mira...

      saludos
      Carlos

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  3. Hubo un viejo que sentado en la playa sintio el sonido de unas campanitas, y jugueteando con la arena vio un cangrejo entrar y salir de un hoyo. Mirando fijamente al cangrejo oyo que el sonido de campanitas salia de su cueva y que paso, eran monedas de oro. Los doblones y peluconas de oro. Era un tesoro de los piratas. Que suerte, y sin detector de metales solo con la oreja empinada hacia el hoyo del cangrejo.

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  4. Si me encuentro un tesoro en la Cuba revolucionaria. A que oficina hay que dirigirse para cambiar el oro por CUC?

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  5. La ignorancia es muy atrevida.
    Un abrazo.

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  6. Este chico llegaría lejos, imprevisible final.
    Saludos

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    1. Si, de momento estuvo detenido hasta que se aclaró que no era un arma de exterminio masivo jajaja

      saludos y un placer.
      Carlos

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